Para esta fiesta hay un encargado llamado “Chichihua” éste tiene al Santo Niño desde el 6 de enero hasta el 24 de diciembre y en su casa todos los días le rezan el rosario.
A partir del 16 de diciembre las personas, principalmente las mujeres asisten a la casa del Chichihua a hacer buñuelos mismos que son repartidos entre ellas, los jóvenes y señores acuden primero a la leña y después a la “tecata” para adornar el nacimiento (primero el del Chichihua y posteriormente el del templo)
El 24 de diciembre en la mañana las personas acuden a la casa del Chichihua a hacer nacatamales, mismos que son repartidos en la noche a la gente que acompaña al Santo Niño en la procesión hacía el templo, durante el trayecto se cantan “Las alegrías” y se queman algunas palmas. Al llegar al atrio se quema un castillo, después se celebra la misa y el Santo Niño se queda en el templo hasta el 6 de enero, fecha en que es levantado por el nuevo Chichihua (realizando el ritual anterior).
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